Talamillo del Tozo

Talamillo del Tozo se encuentra en una ondonada al abrigo de los vientos frios del norte. Esta circunstancia es quizás el origen de su nombre derivado de "cuna" o "talamo", un lecho en el cual descansaron sus primeros pobladores.

Lugar de belleza tranquila y bellos rincones, resuenan en sus calles las aguas del arroyo Congostillo, corriente que une su nombre al asentamiento conocido como Cuevas de Puerta, que estuvo situado al oeste de Talamillo. Nombrado en un documento de la catedral de Burgos con fecha de 1243.

La riqueza de la zona y el trabajo de sus gentes, convierten al sitio en lugar de vertería, esto es, una población que elige libremente a su señor, para cambiar protección a cambio de moneda y productos.

Iglesia de Santa Maria

Situada a un extremo de la población, nos descubre una sobria fachada, en la que destaca la espadaña que cobija las campanas, la prosperidad del sitio hace insuficiente sus estructuras y estas se reforman lo largo de los siglos XV y XVI, perdiéndose gran parte del alzado romanico.
Talamillo ofrece al visitante una curiosa estructura, un pequeño anexo que covijó durante años, las reuniones de su concejo, los vecinos se daban cita después de las misas para hablar sobre temas del municipio. Decora esta parte del tiempo los canecillos, figuras que representan oficios, o plasman en la piedra los pecados capitales. El ábside del templo se ha salvado de las reformas de los siglos, piedras de diferentes tonos que marcan las muescas de sus canteros, una de las ventanas esta decorada con sencillos motivos vegetales.